Desde el principio de mi aprendizaje, don Juan había descrito el concepto de "ver" como una capacidad especial que podía cultivarse y que permitía percibir la naturaleza "última" de las cosas.
A través de los años de nuestra relación, yo había desarrollado la idea de que con "ver" él se refería a una percepción intuitiva de las cosas, o a la capacidad de comprender algo de una solo vez, o quizás al don de penetrar las interacciones humanas y descubrir significados y motivos encubiertos.
-Yo diría que esta noche, cuando enfrentaste a la polilla, medio mirabas y medio veías.